La venta de cocaína a domicilio o telecoca está en auge. Al igual que otros servicios de entrega rápida, la distribución de cocaína se ha adaptado al formato de venta online y telefónica. Con telecoca puedes conseguir cocaína con la misma rapidez con la que conseguirías una pizza. De hecho, algunos repartidores de coca van camuflados de falsos “riders” (trabajadores de entrega de comida rápida). Sin embargo, sigue prevaleciendo la manera tradicional para comprar cocaína: en persona, al propio distribuidor o “camello”.
Con telecoca puedes conseguir cocaína con la misma facilidad con la que consigues una pizza, lo que implica un grave problema para la salud pública.
Aprovechando el boom del mercado mundial de cocaína, el fenómeno telecoca se expande por Europa y otras partes del mundo. Nunca antes fue tan fácil conseguir cocaína en Valencia, Madrid o Barcelona, lo que entraña un grave riesgo para la salud pública.
Sin embargo, cabe recordar que el código penal tipifica como delito el cultivo, la elaboración y el tráfico de drogas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas; la posesión ilegal con dichos fines, así como las actividades que promuevan, favorezcan o faciliten su consumo.
El origen de la venta de cocaína a domicilio o telecoca
La venta de cocaína a domicilio no es algo nuevo. En Valencia la telecoca está documentada desde 2011, en Paris desde 2006 y en Chicago o Nueva York desde 2005. Aunque la expansión de internet está directamente relacionada con la venta de estupefacientes, lo cierto es que los narcotraficantes utilizan desde hace tiempo las nuevas tecnologías para distribuir cocaína.
El fenómeno telecoca está directamente relacionado con la expansión de internet. En Valencia está documentada la venta de cocaína a domicilio desde antes del año 2011.
Por otro lado, el confinamiento global en 2020 acentuó la venta de cocaína a domicilio utilizando servicios de entrega de comida rápida. La distribución online de cocaína se lleva a cabo principalmente en la “deepweb” o en “darknet”. Se utilizan aplicaciones de mensajería encriptada en plataformas que operan bajo redes anónimas. En estos sitios podemos buscar listados, contactar con vendedores, realizar pedidos y determinar la entrega, sin revelar la identidad ni la ubicación. Las criptomonedas suelen utilizarse como forma de pago, lo que proporciona un nivel adicional de anonimato. Es importante tener en cuenta que participar en la compra, venta o distribución de drogas, es ilegal y puede tener graves consecuencias.
La telecoca o distribución online de cocaína se lleva a cabo principalmente en darknet o con aplicaciones de mensajería encriptada y plataformas que operan en redes anónimas.
En el comercio mayorista, telecoca representa un desafío para las agencias reguladoras y de aplicación de la ley. La naturaleza anónima de las transacciones y el uso de encriptación dificultan el seguimiento de estas actividades. Además, surgen problemas jurisdiccionales ya que las transacciones a menudo implican movimientos transfronterizos, lo que hace que la coordinación entre los organismos implicados sea más compleja.
Telecoca y venta de comida rápida
Puntualmente se han utilizado los servicios de venta de comida rápida para vender cocaína a domicilio. Pero mayoría de las veces se trata de falsos repartidores que imitan la actividad de estas empresas. El auge del comercio electrónico ha suscitado la aparición de aplicaciones específicas adaptadas al tráfico de drogas que funcionan de forma similar a los servicios de entrega de alimentos. En lugar de pedir comida, los usuarios pueden navegar y seleccionar las drogas, solicitar su entrega en un lugar específico y puntuar la calidad del producto y del servicio.
La telecoca se lleva a cabo mediante aplicaciones que imitan a los servicios de entrega de comida rápida. Proporcionan menús, listados de productos (drogas) y también permiten compartir la experiencia del usuario.
La telecoca suele utilizar técnicas de encriptación y anonimato para ocultar la identidad del comprador, del vendedor y la ruta de entrega. Del mismo modo, se suelen utilizar las criptomonedas como forma de pago para reforzar el anonimato y evitar el rastreo del dinero.
Sin embargo, es importante enfatizar que participar en estas actividades es ilegal y puede tener graves consecuencias. La policía trabaja constantemente combatiendo estos servicios, monitoreando estas plataformas y coordinando esfuerzos a nivel internacional para interrumpir sus operaciones.
Los usuarios del telecoca no solo están expuestos a riesgos legales, sino que también asumen peligros asociados al consumo de drogas de origen desconocido. Resulta fundamental promover la conciencia sobre los riesgos asociados al consumo de drogas, alentando a las personas a buscar ayuda si están luchando contra la adicción a la cocaína.
Métodos preferidos para la venta de cocaína
Si bien la investigación sobre el comercio minorista de cocaína es limitada, en general sabemos que el método cara a cara para comprar y entregar cocaína es el más frecuente. Sin embargo, los últimos datos indican que esto puede estar cambiando. La diversificación del mercado minorista se ha visto influenciada por la entrega directa a los consumidores de pequeñas cantidades de cocaína adquiridas a través de internet (telecoca).
El ‘cara a cara’ sigue siendo el método preferido para la venta de cocaína, pero cada vez se utilizan más las redes sociales y las aplicaciones de mensajería para adquirir drogas (telecoca).
Con un récord histórico en la producción, el aumento de la pureza y los precios de la cocaína estabilizados, la coca es una de las drogas que genera mayores ingresos para los traficantes. La investigación y análisis de los datos sugieren que las redes sociales y las herramientas de comunicación encriptada se utilizan cada vez más en Europa para el tráfico minorista de cocaína. Como consecuencia, la accesibilidad a la cocaína ha aumentado en Europa un 40 por cien en los últimos cinco años. Es decir, resulta cada vez más fácil poder conseguir cocaína en cualquier ciudad europea.
La venta de cocaína a domicilio en Europa
En la encuesta del EMCDDA “¿cómo le llega habitualmente la cocaína?” observamos que más de las tres cuartas partes de los encuestados utilizaron el método de entrega habitual (encontrarse cara a cara con el distribuidor fuera de casa), seguido de la entrega a domicilio o telecoca (uno de cada tres usuarios). Otras personas informaron que la cocaína se entregaba sin ningún contacto personal en un lugar acordado y una pequeña parte recibieron la cocaína a través del servicio postal.
Tres de cada cuatro personas que compraron cocaína lo hicieron fuera de casa de forma presencial. Sin embargo, uno de cada tres encuestados informan que el método habitual de entrega de la cocaína fue la venta a domicilio o telecoca.
En 2018 la EMCDDA advirtió que estos métodos de compraventa de drogas reflejan una ‘uberización’ del tráfico de cocaína. Los datos recientes reflejan claros síntomas de un mercado competitivo en el que los vendedores promueven servicios adicionales, más allá del producto, como la entrega rápida en cualquier lugar y a cualquier hora.
La venta de drogas se ha convertido en un particular servicio de entrega a domicilio, a la par que otros servicios en nuestra sociedad de consumo. Los clientes demandan eficiencia, servicio, puntualidad y amabilidad de los distribuidores. Por lo tanto, los distribuidores de drogas se esfuerzan cada vez más en vender cocaína de forma más inteligente, no más difícil. Evidentemente, el mercado de la droga está en permanente evolución.
Aclaraciones
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Si has encontrado este artículo buscando estos términos, probablemente padezcas un problema de adicción. Además, te recordamos que participar en la compra, venta o distribución de drogas, supone un delito contra la salud pública y puede tener importantes consecuencias penales.