El tabaquismo es la adicción más prevalente del mundo junto al alcoholismo. Esto se debe fundamentalmente al elevado poder adictivo de la nicotina, el principal alcaloide del tabaco. Desde hace años la ciencia intenta encontrar un tratamiento eficaz para la adicción al tabaco pero ha obtenido resultados dispares. Del yoga a la acupuntura, pasando por la hipnosis, el tratamiento farmacológico o la psicoterapia para dejar de fumar.
Como ocurre con el resto de las adicciones, no existe un tratamiento para la adicción a la nicotina que garantice al cien por cien superar el tabaquismo. Probablemente la combinación de las distintas alternativas, junto a una motivación apropiada, ofrece el mejor resultado. Veamos cuales son los diferentes tratamientos disponibles para conseguir dejar de fumar.
La adicción a la nicotina
Antes de conocer los tratamientos para dejar de fumar quizás debamos conocer un poco mejor la adicción al tabaco. Como comentábamos, la nicotina es el principal responsable del tabaquismo. La adicción a la nicotina es un hábito que surge del uso repetido de los productos del tabaco, principalmente los cigarrillos. La nicotina es una sustancia fuertemente adictiva. Es decir, fumar causa una gran dependencia física y psicológica. Este es el mecanismo de acción de la adicción a la nicotina:
Al fumar un cigarrillo la nicotina se absorbe a través de los pulmones y pasa al torrente sanguíneo, por lo que llega rápidamente al cerebro. Allí se une a receptores neuronales que liberan dopamina, un neurotransmisor asociado al placer y la recompensa. Por esta razón fumar crea una sensación momentánea de relajación y bienestar.
Tal y como ocurre con otras adicciones, la liberación de dopamina refuerza el deseo de repetir la conducta. El refuerzo positivo es un factor clave en el desarrollo de la adicción al tabaco y su tratamiento. Con el tiempo el cerebro se adapta a la presencia de nicotina, volviéndose menos sensible a la dopamina, lo que lleva a la necesidad de dosis más altas para conseguir el mismo efecto (tolerancia).
Por eso fumar con regularidad provoca dependencia física ya que el cuerpo se acostumbra a un cierto nivel de nicotina. Cuando este nivel baja se producen síntomas de abstinencia (principalmente irritabilidad, ansiedad y ganas intensas de fumar). Si quieres tener una idea aproximada de tu nivel de dependencia a la nicotina puedes realizar el test de la adicción al tabaco.
Factores implicados en la adicción al tabaco
Además de la nicotina existen otros factores involucrados en el desarrollo del tabaquismo. Es importante conocer estos factores para llevar a cabo el tratamiento para la adicción al tabaco. Veamos cuales son estos factores.
Fumar ejerce un efecto inhibidor de la monoamino oxidasa (1), una enzima relacionada con la liberación de dopamina. Este mecanismo está fuertemente involucrado en las propiedades adictivas del tabaco.
Además, en el humo del tabaco existen compuestos que pueden estar involucrados en el desarrollo del tabaquismo: la anatabina, las betacarbolinas y el acetaldehído, pueden potenciar directamente o indirectamente la adicción a la nicotina.
Por último, las empresas tabacaleras suelen añadir agentes aromatizantes al tabaco y los cigarrillos. Estos aditivos pueden hacer que fumar resulte más atractivo, especialmente para las personas más jóvenes, y aumentar la probabilidad de iniciación y adicción.
(1) Inhibición de la monoaminooxidasa en fumadores de cigarrillos: de los estudios preclínicos a la regulación de los productos de tabaco (Sved Alan F., Weeks Jillian J., Grace Anthony A., Smith Tracy T., Donny Eric C. Frontiers in Neuroscience. V,16;2022).
Abordar los factores relacionados con el tabaquismo
Desarrollar el tratamiento psicológico para la adicción al tabaco implica abordar los principales factores relacionados, más allá de la adicción a la nicotina. Por un lado el condicionamiento conductual, y por otro los factores sociales y ambientales relacionados.
En cuanto al condicionamiento, fumar se asocia fuertemente con determinadas actividades y situaciones (descansos en el trabajo, celebraciones, etc.) creando una respuesta condicionada. Estas asociaciones pueden desencadenar el deseo de fumar y reforzar de esta manera el hábito tabáquico.
Por otro lado, aspectos sociales como la presión de los compañeros, la publicidad y la exposición al tabaquismo en determinados entornos, también contribuyen a la adicción al tabaco. Estos factores pueden influir tanto en el inicio como en el mantenimiento del tabaquismo.
Es importante señalar que si bien la nicotina es la principal causante del tabaquismo, el efecto combinado de los factores relacionados contribuye a la complejidad de la adicción al tabaco. Esta es una de las razones por las que dejar de fumar puede resultar tan difícil. Al intentar dejar de fumar, las personas no sólo deben romper con la dependencia a la nicotina sino que también deben afrontar las asociaciones sensoriales, psicológicas y conductuales asociadas al tabaquismo. Por eso, la comprensión integral de la adicción al tabaco resulta fundamental para el desarrollo de un tratamiento eficaz para dejar de fumar.
Tratamientos para dejar de fumar
Según la OMS, existen 1300 millones de fumadores en el mundo. Debemos recordar que el tabaco es la principal causa de cáncer y que fumar mata a más de 8 millones de personas al año, de los cuales 1,3 millones son fumadores pasivos. Por razones como estas, necesitamos encontrar un tratamiento para dejar el tabaco que sea lo más eficaz posible. Veamos los distintos tratamientos y estrategias disponibles para conseguir dejar de fumar.
Tratamiento psicológico para la adicción al tabaco
El tratamiento de elección para dejar de fumar es la psicoterapia. Consiste en ayudar al fumador o fumadora a interrumpir el hábito tabáquico y superar la abstinencia. Por ejemplo, se establecen pautas dirigidas a una gestión saludable del estrés, el manejo de la ansiedad o la prevención de recaídas. Sin embargo, muchas personas mejoran los resultados cuando el tratamiento psicológico se combina con otras estrategias.
Terapia de reemplazo con nicotina
Este tratamiento consiste en sustituir gradualmente la nicotina del tabaco con diferentes productos que permiten una liberación sostenida del alcaloide. Fundamentalmente se presentan en forma de chicles, comprimidos para chupar, parches o aerosoles. Su finalidad es aliviar los síntomas de abstinencia frente a la reducción parcial o total del consumo de tabaco. Son productos que no requieren receta médica, pero es aconsejable utilizarlos con orientación profesional sanitaria.
Tratamiento farmacológico para dejar el tabaco
La terapia farmacológica para la adicción al tabaco ofrece buenos resultados en un gran número de personas. En España están autorizados 2 principios activos para el tratamiento del tabaquismo: el bupropión y la citisina. Cualquiera de estos fármacos debe estar prescrito por su médico antes de empezar el tratamiento. En ambos casos, la recomendación es acompañar el tratamiento farmacológico con tratamiento psicológico.
Bupropión es un fármaco antidepresivo que ha demostrado cierta eficacia para aliviar el deseo de fumar. Además, puede aliviar los síntomas de abstinencia de nicotina, incluyendo el estado de ánimo deprimido, la irritabilidad, la dificultad para concentrarse y el aumento del apetito.
La citisina es un fármaco que, combinado con el tratamiento psicológico para dejar de fumar, ofrece mejores resultados que la terapia de reemplazo con nicotina. Es un tratamiento relativamente breve (25 días) pero que puede provocar algunos efectos secundarios leves, principalmente gastrointestinales.
Por último, los medicamentos con vareniclina (Champix ®) fueron temporalmente retirados en 2021 por la presencia de impurezas. El pasado año, tanto la FDA como la Agencia Europea del Medicamento (EMA), paralizaron cautelarmente la comercialización de vareniclina. Las personas bajo tratamiento con vareniclina deben ponerse en contacto con su médico para valorar otras alternativas.
Terapias alternativas para dejar de fumar
No existe evidencia científica suficiente que demuestre la efectividad del mindfulness como tratamiento de elección para la adicción al tabaco. En cuanto a la hipnosis para dejar de fumar, no hay pruebas suficientes para determinar si la hipnoterapia es más efectiva que otras formas de apoyo conductual o dejar de fumar sin ayuda.
Estimulación Magnética Transcraneal
Esta nueva técnica no invasiva ha mostrado buenos resultados en personas con adicción al tabaco. La estimulación magnética transcraneal consiste en la aplicación de campos magnéticos en diferentes áreas del cerebro. Con una creciente evidencia científica, esta novedosa opción de tratamiento está disponible para personas que desean dejar el tabaco pero no han tenido éxito con los enfoques farmacológicos. En la clínica Ivatad Valencia no desarrollamos directamente esta técnica.
Terapia facilitada con psilocibina
Esta técnica se encuentra en fase de investigación. Las terapias asistidas con psicodélicos, como la psilocibina, podrían mejorar los resultados de los tratamientos más tradicionales. Debemos tener en cuenta que son tratamientos acompañados en todo momento de psicoterapia y profesionales acreditados. Por esta razón, algunos países como Australia ya han empezado a utilizar las terapias psicodélicas para determinadas patologías. Si necesitas información detallada sobre la terapia con psilocibina para dejar de fumar haz clic en el enlace.