Si bien la adicción al sexo no está incluida como diagnóstico específico en el DSM-5, el manual CIE-11 contempla el comportamiento sexual compulsivo o hipersexualidad. Sin embargo, esta denominación sigue siendo tema de amplia discusión clínica. El diagnóstico de la hipersexualidad está basado en criterios específicos, como la incapacidad para controlar la conducta sexual, la persistencia de dicha conducta a pesar de las consecuencias negativas o el malestar que causa a uno mismo o a los demás.
¿Qué es la adicción al sexo?
La adicción al sexo o hipersexualidad es una desadaptación del comportamiento sexual caracterizada por la conducta sexual compulsiva. Afecta tanto a los hombres (satiriasis) como a las mujeres (ninfomanía), aunque es más frecuente en los varones. Las personas con adicción al sexo suelen ver afectada negativamente su vida personal, social o profesional como consecuencia de este comportamiento.
La adicción al sexo o hipersexualidad es una desadaptación del comportamiento caracterizada por la compulsividad sexual.
Tipos de adicción al sexo
Es importante tener en cuenta que el concepto de adicción al sexo sigue siendo controvertido, aunque existe un debate en curso sobre su validez. Sin embargo, se han propuesto siete variantes de la adicción al sexo (adicciones sexuales):
- Adicción al cibersexo (sexo en internet)
- Adicción a la pornografía
- Adicción a la prostitución
- Adicción a las relaciones sexuales múltiples
- Exhibicionismo y voyeurismo
- Adicción a la masturbación
- Adicción a fantasías sexuales
Algunos expertos en adicciones argumentan que la hipersexualidad puede entenderse más como un trastorno compulsivo del comportamiento que como una adicción. Sin embargo, no todos los especialistas están de acuerdo con esta clasificación de la adicción al sexo. Antes de abordar con más detalle las adicciones sexuales puedes realizar aquí el test de la adicción al sexo.
Adicción al sexo en internet (cibersexo)
La adicción al cibersexo consiste en un patrón de participación compulsiva en actividades sexuales a través de internet. Implica una interacción frecuente con determinados sitios web, salas de chat o mundos virtuales, en busca de gratificación sexual. Los principales síntomas son de la adicción al cibersexo son:
- elevada participación en actividades sexuales a través de internet
- consumo compulsivo de pornografía en internet
- escalada del comportamiento adictivo
- impacto emocional negativo
La adicción al sexo en internet es un patrón compulsivo de participación en actividades sexuales a través de la red.
Cabe resaltar que no todas las personas que practican cibersexo o visualizan contenido sexual en internet tienen adicción al sexo.
El tratamiento de la hipersexualidad a través de internet generalmente implica la combinación de psicoterapia, grupos de apoyo y farmacoterapia. No obstante, debemos recordar que no todas las personas que practican cibersexo o consumen contenido sexual en internet son adictos al sexo. La adicción al cibersexo se diagnostica en función de criterios como la incapacidad de controlar el comportamiento, el síndrome de abstinencia o las consecuencias negativas. Para saber más sobre la adicción al cibersexo lee este artículo.
Adicción a la pornografía
La adicción a la pornografía hace referencia a un patrón compulsivo de consumo de material pornográfico. Implica la necesidad persistente de consumir pornografía y suele interferir con el funcionamiento rutinario y las relaciones personales. Los principales síntomas de la adicción a la pornografía son:
- consumo compulsivo de pornografía
- pérdida de control sobre el consumo del porno
- tolerancia a los efectos gratificantes
- interferencia en la vida cotidiana
- afectación psicológica negativa
La adicción a la pornografía implica el uso compulsivo de pornografía.
Podemos considerar la adicción a la pornografía como un tipo de adicción al sexo. El tratamiento para la adicción a la pornografía generalmente implica la combinación de distintos enfoques terapéuticos. La terapia cognitivo conductual se utiliza para identificar y cambiar pensamientos y creencias sobre la pornografía, desarrollar habilidades de afrontamiento y establecer un comportamiento sexual saludable. Sin embargo, debemos recordar que no todos los que consumen pornografía sufren hipersexualidad. Para saber más sobre la adicción a la pornografía lee este artículo.
Adicción a la prostitución
La adicción a la prostitución, conocida como adicción al trabajo sexual o participación compulsiva en el pago de servicios sexuales, hace referencia a un patrón compulsivo en la contratación de servicios sexuales. Implica un impulso persistente de buscar y pagar por encuentros sexuales. Los principales síntomas de la adicción a la prostitución son:
- comportamiento compulsivo
- fuerte deseo de utilizar prostitución
- importantes consecuencias negativas
- tolerancia a sus efectos
La adicción a la prostitución es un patrón compulsivo del comportamiento en el pago de servicios sexuales. Implica un impulso persistente de buscar y pagar por servicios de prostitución.
Cabe destacar que la adicción a la prostitución suele tener importantes consecuencias negativas para uno mismo y para terceras personas. A menudo causa problemas financieros, daña las relaciones de pareja y aumenta el riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual. Además, estas personas pueden experimentar gran sentimiento de culpa, vergüenza y baja autoestima debido a la incapacidad de controlar el comportamiento y al estigma asociado con la prostitución. También aumenta las dificultades para establecer relaciones personales saludables y suele provocar insatisfacción general.
La adicción a la prostitución suele tener importantes consecuencias negativas.
El tratamiento para la adicción a la prostitución generalmente implica un enfoque integral. Incluye terapia individual, grupos de apoyo y la participación de sexólogos y especialistas en adicciones. Consiste en abordar los problemas emocionales y psicológicos subyacentes, desarrollar nuevos mecanismos de afrontamiento y establecer patrones saludables de la relación con uno mismo y con los demás. Debemos tener en cuenta que la “adicción a la prostitución” no está reconocido como un trastorno específico. Existen debates en curso sobre su clasificación y si debe considerarse como un trastorno compulsivo del comportamiento o como hipersexualidad.
Adicción a las relaciones múltiples
La adicción a relaciones múltiples hace referencia a un patrón compulsivo de participación simultánea en diferentes relaciones con carácter sexual. Las personas afectadas por este trastorno luchan por mantener relaciones monógamas, pero con frecuencia se involucran en múltiples relaciones a pesar de sus consecuencias negativas. La adicción a las relaciones múltiples está caracterizada por:
- comportamiento compulsivo
- tolerancia (necesitan participar cada vez en más encuentros sexuales para lograr el mismo nivel de satisfacción)
- problemas subyacentes (baja autoestima, traumas no resueltos, insatisfacción en la relación principal y una gran necesidad de validación emocional)
Participar en múltiples relaciones sexuales puede provocar un daño significativo en la relación principal. La pareja suele experimentar dolor, pérdida de confianza y un sentimiento de traición. Así pues, la intimidad emocional puede verse comprometida seriamente. La ocultación y descubrimiento de relaciones múltiples suele provocar la separación, el divorcio y un trauma emocional duradero.
El tratamiento para la adicción al sexo con múltiples aventuras generalmente implica la combinación de terapia individual y terapia de pareja. La intervención individual ayuda a explorar y abordar los problemas emocionales subyacentes que contribuyen al comportamiento adictivo. Complementariamente, la terapia de pareja ayuda a reconstruir la confianza y mejorar la comunicación.
No todas las personas con relaciones múltiples son adictas al sexo ya que estas pueden ocurrir por causas no relacionadas con las adicciones.
Exhibicionismo y voyeurismo
El exhibicionismo y el voyeurismo son parafilias que pueden desembocar en comportamientos sexuales compulsivos (exhibición de los órganos genitales a desconocidos y observación de personas desnudas o involucradas en actividades sexuales).
- El exhibicionismo es un comportamiento caracterizado por la necesidad de mostrar los órganos genitales a otras personas, a menudo desconocidas y sin consentimiento. En el contexto de la adicción al sexo, los comportamientos exhibicionistas implican actos compulsivos de exponerse en público o participar en comportamientos exhibicionistas en internet. También se considera exhibicionismo enviar imágenes sexuales a través de internet a personas desconocidas.
- El voyeurismo consiste en observar a personas involucradas en actividades sexuales o desnudas, a menudo sin su consentimiento. En el contexto de la adicción al sexo, las personas con comportamientos voyeristas buscan compulsivamente oportunidades para observar a otros en situaciones íntimas, ya sea en persona o a través de medios digitales, sin que se den cuenta.
Estos comportamientos suelen provocar graves consecuencias negativas a terceras personas. Por ejemplo, problemas legales, daños a terceros y sentimiento de culpa o vergüenza. Las parafilias suelen dificultar la capacidad de establecer relaciones sanas. Por otro lado, tanto el exhibicionismo como el voyerismo, implican la invasión del derecho a la intimidad. Llevar a cabo estos comportamientos sin consentimiento genera una situación punible y éticamente reprochable, ya que se desconoce la autonomía o bienestar de las personas observadas o expuestas.
El exhibicionismo y el voyeurismo son comportamientos parafílicos que pueden desembocar en conductas compulsivas, por lo que se incluyen como variantes de la adicción al sexo.
El tratamiento para el exhibicionismo y el voyeurismo implica abordar los factores psicológicos subyacentes. La psicoterapia ayuda a identificar los comportamientos distorsionados y establecer alternativas saludables para el deseo sexual.
Adicción a la masturbación
La adicción a la masturbación hace referencia a un patrón compulsivo de autoestimulación sexual. Puede ser considerada una variante de la adicción al sexo e implica la necesidad de masturbarse persistentemente, lo que a menudo interfiere en el bienestar general. Los principales síntomas de la masturbación compulsiva son:
- deseo incontrolable por masturbarse
- escalada del comportamiento (cada vez más)
- consecuencias negativas que conlleva el exceso de masturbación
La adicción a la masturbación puede ser considerada una variante de la adicción al sexo. Implica la necesidad de masturbarse persistentemente, lo que a menudo interfiere en el bienestar general.
El tratamiento de la masturbación compulsiva radica principalmente en la psicoterapia. La terapia cognitivo conductual puede ayudar a los adictos al sexo a cambiar sus creencias y pensamientos distorsionados sobre la masturbación. Permite desarrollar nuevos mecanismos de afrontamiento y establecer un marco saludable del comportamiento sexual. La masturbación es un comportamiento sexual normal y saludable para la mayoría de las personas.
Para saber más sobre la adicción a la masturbación lee este artículo.
Adicción a las fantasías sexuales
La adicción a las fantasías sexuales hace referencia a un patrón compulsivo de elaboración de fantasías de carácter sexual. Implica una preocupación persistente (y a menudo obsesiva) con imaginaciones sexuales que pueden interferir en el bienestar general. Sus principales características son los pensamientos intrusivos y un considerable impacto psicológico o emocional negativo. Los afectados pueden sentir culpa o vergüenza por el contenido de sus fantasías y tener dificultad para diferenciar la fantasía de la realidad.
La adicción a las fantasías sexuales hace referencia a un patrón compulsivo de elaboración de fantasías de carácter sexual.
El tratamiento de las fantasías sexuales, en el contexto de la hipersexualidad, implica el desarrollo de mecanismos de afrontamiento saludables. La psicoterapia ayuda a estas personas a identificar los pensamientos y creencias distorsionados sobre las fantasías sexuales, a desarrollar estrategias para controlar los pensamientos intrusivos y establecer una relación saludable con su imaginación sexual. Además, abordar los problemas emocionales y psicológicos subyacentes puede ser beneficioso para controlar y reducir las fantasías sexuales excesivas.
Las fantasías sexuales son un aspecto normal y saludable de la sexualidad humana. No todas las personas que tienen fantasías sexuales son adictas al sexo.
Si tú, o alguien de tu entorno más cercano, presenta alguno de los comportamientos anteriores puedes contactar con Ivatad en el 617846402. Somos especialistas en adicciones comportamentales.