Cómo afecta el alcohol al estado de ánimo

cómo afecta el alcohol en un contexto festivo

Saber cómo afecta el alcohol a nuestro estado de ánimo puede resultar importante. El alcohol se encuentra altamente asociado a la gestión del ocio. Además, muchas personas utilizan el alcohol en gran medida como una forma de socializar. Beber está totalmente normalizado en nuestra sociedad: bebemos si estamos felices, bebemos si estamos tristes o incluso bebemos si queremos relajarnos. A bajas dosis el alcohol tiene un efecto euforizante, pero si aumentamos su consumo el efecto es absolutamente opuesto. El alcohol, en realidad, es un potente depresor del sistema nervioso central.

En general, la gente suele estar más pendiente de los posibles efectos físicos del alcohol (resaca, dolor de cabeza) que no de los efectos sobre el comportamiento o las emociones. En el centro de desintoxicación de alcohol Ivatad le llamamos "la trampa que esconde el alcohol".

Casi nadie piensa en cómo afecta el alcohol a su estado de ánimo. Lo cierto es que asociamos el alcohol al placer, la gratificación o la diversión. Aun siendo una droga altamente estimulante, en realidad el alcohol es una sustancia eminentemente depresora. Cuando consumes alcohol pretendes disfrutar, socializar o simplemente pertenecer. Sin embargo, cómo afecta el alcohol a tu cuerpo o a tu estado de ánimo es algo que vas descubriendo con el tiempo. Seguramente nada que hayas sido capaz de predecir.

 

Beber alcohol modifica tu estado de ánimo

Para entender cómo afecta el alcohol a tu estado de ánimo necesitas saber que el etanol es una molécula extremadamente potente a nivel neuronal. El consumo de alcohol provoca emociones positivas a corto plazo, como sensación de comodidad y relajación. El alcohol, a bajas dosis, disminuye la ansiedad y provoca bienestar. Esto es debido a la acción del etanol sobre partes muy concretas del sistema nervioso central. Los efectos placenteros de la ingestión de alcohol son el resultado de un aumento de los niveles de dopamina y de opioides endógenos en las vías de recompensa del cerebro. También afecta directamente a otros sistemas de neurotransmisores, incluidos los del glutamato, la glicina, la acetilcolina o la serotonina (principal responsable de la regulación del estado de ánimo).

Debemos tener en cuenta que no todas las bebidas alcohólicas son iguales. Pero independientemente de si hablamos de bebidas fermentadas o licores, el contenido en etanol es el determinante de los efectos que tiene el alcohol sobre nuestro estado de ánimo.

En cualquier caso, todas las bebidas alcohólicas tienen una cantidad suficiente de etanol para modificar nuestro estado de ánimo. Una concentración de alcohol en sangre (BAC) entre el 0,03 % y el 0,10 % provoca una mejora general del estado de ánimo, mayor confianza en uno mismo y aumento de la sociabilidad. Pero también afecta a la coordinación motora, se produce enrojecimiento de la cara y queda afectado el juicio.

Por último, es necesario apuntar que el contexto en el que se produce el consumo de alcohol es un gran condicionante de la modificación del estado de ánimo. Si consumes pequeñas cantidades de alcohol en un ambiente distendido, probablemente causará un efecto euforizante instantáneo y agradable. Pero si consumes alcohol en un estado de tristeza o soledad, posiblemente el alcohol acentuará un estado similar al de una depresión.

 

El alcohol afecta de forma distinta a cada persona

Como comentamos, el contexto en el que se produce el consumo de alcohol puede condicionar la forma en que nos afecta beber. A continuación debemos saber que: a mayor graduación alcohólica mayor afectación física o emocional puede provocarnos el consumo de alcohol. No es lo mismo beber vodka que beber vino. Por otro lado, resulta importante saber que las mujeres son físicamente más susceptibles al efecto del alcohol que los hombres. Es una cuestión metabólica y no debemos asociarla a la resistencia, la fortaleza o la personalidad. El alcohol afecta de forma diferente a cada persona.

 

cuando bebes en soledad o para evadirte cómo afecta el alcohol
Consumir alcohol en soledad puede provocarte efectos depresivos.

 

Entonces ¿cómo afecta el alcohol a las mujeres? El consumo de riesgo de alcohol para las mujeres es más bajo que para los varones. Esto se mide en UBEs por día. Cada UBE corresponde a unos 10 gramos de alcohol puro: una cerveza (5º), media copa de vino (10º) o un "chupito" de licor (40º) equivalen a una UBE. El consumo de riesgo de alcohol queda establecido de la siguiente forma:

  • más de 4 UBEs al día (hombres)
  • más de 2-2,5 UBEs al día (mujeres)

Sin embargo, en cuanto al estado de ánimo, tanto a los hombres como a las mujeres el alcohol puede afectarles de la misma forma. Una de las sensaciones subjetivas más frecuentes al consumir alcohol es la mejora de la autoimagen. Las personas tienden a sentirse más atractivas o interesantes cuando consumen alcohol. El alcohol es un gran desinhibidor sexual. Del mismo modo, uno de cada tres bebedores sociales (hombres y mujeres) dicen sentir cierta agresividad al consumir bebidas de alta graduación. Físicamente, una alcoholemia superior al 0,10% provoca mareo, sedación, problemas de equilibrio y visión borrosa. Confusión, dificultad para hablar, tambaleo, mareos y vómitos.

 

 

El alcohol puede hacer que seas más impulsivo o impulsiva

El alcohol modifica nuestro comportamiento. Sea cual sea la cantidad que se ingiera. Aunque no lo hace por igual a todo el mundo, beber alcohol afecta a nuestro cuerpo y a nuestra conducta. Como comentábamos, los principales factores que determinan cómo afecta el alcohol a nuestro cuerpo y nuestro estado de ánimo son:

  • La graduación alcohólica de la bebida
  • El sexo de la persona
  • El contexto en que se produce el consumo de alcohol

Dicho esto, es necesario remarcar que incluso pequeñas cantidades de alcohol pueden afectar a nuestra toma de decisiones. El alcohol puede hacer que seas más impulsivo o incluso que tomes decisiones que en estado de sobriedad nunca tomarías. Dejarse llevar por la euforia que provoca el alcohol puede causarnos graves problemas. Por ejemplo, conducir habiendo bebido "lo normal". O intentar escapar de la tristeza bebiendo. Por esta razón, el consumo de alcohol debe ser siempre moderado. De hecho, no existe riesgo cero para cantidad alguna de alcohol. La opción más segura es no beber. Por otro lado, intentar "compensar" tu estado anímico con alcohol es la peor decisión que puedes tomar.

Cuando notes cambios extraños en tus emociones al beber alcohol debes preguntarte cómo afecta el alcohol a tu estado de ánimo. Y desde luego, si tienes capacidad para disfrutar, divertirte o relajarte sin beber alcohol. Por extensión, debes tener en cuenta que el consumo repetido de alcohol puede causar graves daños a tu estado de salud. De hecho, hay que personas que tienen una predisposición particular a los efectos negativos del alcohol y terminan padeciendo alcoholismo. Si alguno de estos aspectos te atormenta debes contactar con un médico o un psicólogo especialista en adicciones.