La mayoría de las personas utilizan las apuestas deportivas para divertirse y ganar dinero. Sin embargo, algunas las utilizan principalmente para sentirse mejor, lo que puede conducir a graves problemas. Por esta razón, muchas deciden dejar las apuestas deportivas o la ruleta. De hecho, la mayoría lo consigue con facilidad. Sin embargo, otras se ven envueltas por la adicción al juego y continuan apostando a pesar de las consecuencias negativas.
Vamos a describir las implicaciones que tiene la exposición repetida a las apuestas. Además, si sueles apostar, veremos algunos consejos para jugar de forma saludable. Por último, hablaremos sobre cómo deben actuar las personas que encuentran dificultades para dejar las apuestas deportivas.
Comprender a quien hace apuestas deportivas
Comprender la vivencia del jugador resulta fundamental para ayudar a una persona a dejar las apuestas deportivas. Recordemos que aquellos que están luchando contra el juego habitualmente pierden el control sobre esta conducta. Generalmente, tienen sentimiento de culpa, vergüenza o remordimiento. Además, frecuentemente piensan en cómo afecta este comportamiento a las personas más cercanas.
Cabe destacar que, una persona con adicción al juego suele padecer una angustia importante al intentar recuperar el dinero perdido. Esto puede llevarle a comportarse de forma anómala o extraña, lo que suele crear un gran desconcierto entre la familia o los amigos. Comprender que jugar a las apuestas deportivas es un comportamiento adictivo y que el trastorno del juego es una enfermedad, puede resultar de vital importancia. Es decir, aceptar la ludopatía como una enfermedad sirve para comprender mejor este comportamiento.
Cabe resaltar que, experimentar todas estas emociones suele resultar abrumador, lo que impide al adicto a las apuestas deportivas a pensar con claridad. De hecho, los pensamientos angustiantes a menudo conducen al ludópata a intensificar su contacto con el juego.
No todo el mundo que apuesta necesita dejar el juego
Las apuestas deportivas, al igual que la adicción a los bitcoins, al alcohol o a las drogas, no suele crear una necesidad inmediata; por lo menos a corto plazo. Ni en sentido negativo ni en el aspecto más gratificante. Con todas las adicciones pasa un poco lo mismo, se empieza poco a poco.
El juego es una conducta que ofrece inicialmente efectos muy recompensantes. Activa los circuitos neuronales responsables de la gratificación y el placer. De hecho, cuando ganamos las apuestas sentimos alegría y bienestar. Es por esto que tendemos a repetir la conducta de juego. Pero determinadas personas, sin darse cuenta, quedarán atrapados en la búsqueda de dicha recompensa. Y cada vez con mayor intensidad. Incluso generando consecuencias negativas, el adicto al juego necesita seguir apostando. Esto es la ludopatía y la razón por la que algunos quedan enganchados a las apuestas deportivas. Pasa exactamente lo mismo con el alcoholismo o la adicción a la cocaína, salvando las diferencias.
Fases de la adicción a las apuestas deportivas
Como comentábamos, nadie necesita dejar las apuestas o la ruleta nada más empezar a utilizarlas. Es decir, a través de la exposición reiterada al juego y la combinación de ciertos factores, acabamos teniendo un problema de adicción a las apuestas deportivas. Además, no todo el mundo padece este problema a la misma velocidad. Hay personas que son más vulnerables al efecto de las apuestas deportivas y desarrollan la patología más rápidamente. También cabe mencionar la predisposición genética que presentan estas personas para desarrollar el juego problemático o ludopatía.
Al igual que ocurre con otras adicciones, el tratamiento más eficaz para dejar las apuestas deportivas o la ruleta se desarrolla mediante un proceso de cambio. Las personas con ludopatía experimentan las siguientes fases que vemos a continuación, desde la aparición de los problemas con el juego hasta el bienestar.
Precontemplación para dejar el juego
El jugador puede sentir en esta etapa que los aspectos positivos del juego superan a los negativos. Disfruta con el juego y no lo ve como un problema. En esta fase del proceso de cambio es posible que las apuestas deportivas no estén causando un daño considerable, ni al jugador ni a quienes le rodean.
Contemplación para dejar las apuestas deportivas
En esta etapa el jugador empieza a tener sentimientos encontrados sobre el juego. A menudo lo disfruta, aunque sabe que le cuesta excesivo tiempo y dinero. De este modo, continúa apostando porque le acompaña una falsa sensación de control. En esta fase el jugador es consciente del problema que le causan las apuestas y piensa en cómo puede eliminarlo.
Preparación para la resolución del problema del juego
En esta etapa el jugador se siente preparado para dejar la ruleta o las apuestas deportivas y ha tomado la decisión de hacer algo al respecto. Es posible que haya elegido una fecha en un futuro cercano en la que empezar a hacer esos cambios.
Acción respecto de la resolución del problema
El adicto está en modificación activa de su comportamiento de juego. Probablemente recurra a un psicólogo especialista en adicciones o a un psicólogo experto en ludopatía para solicitar su ayuda. Este le ofrecerán una serie de herramientas que puede utilizar para cambiar su comportamiento de juego. De hecho, el apoyo es muy importante para el jugador en este momento, ya que puede estar experimentando emociones difíciles al reflexionar sobre las consecuencias que tiene su conducta de juego.
Mantenimiento para dejar de jugar de forma sostenida
Esta etapa puede ser la más difícil para el jugador. Aquí es donde será necesario convertir los nuevos comportamientos en hábitos saludables. Los nuevos comportamientos reemplazarán a los antiguos a través de la repetición continua de la conducta. Esta etapa puede resultar particularmente compleja, por lo que el apoyo de los demás puede resultar muy conveniente.
La recaída en las apuestas deportivas
El trastorno del juego es una enfermedad crónica, por lo que es posible que el adicto intente controlar las apuestas deportivas y empiece a jugar de nuevo. Si esto sucede, trate de no sentirse desanimado. Sin embargo, bajo nuestro punto de vista, no debemos comprender la recaída como una etapa natural del proceso. Dicho esto, una vez se da la recaída en las apuestas ofreceremos apoyo al ludópata para averiguar las razones que le llevaron a volver a jugar. De este modo, reconstruiremos el proceso del tratamiento para conseguir dejar las apuestas deportivas definitivamente.
Consejos si no puedes dejar las apuestas deportivas
En primer lugar, si no puedes dejar de jugar busca ayuda especializada. Si leyendo todo lo anterior decides seguir apostando, lee estos consejos a continuación. Antes de realizar cualquier apuesta, sal de la aplicación para darte un tiempo y piensa las cosas. Puede ser un momento, un minuto o el tiempo que tardes en tomar un café. Convertir esa pausa en un hábito te ayudará a evitar el “bet regret” o arrepentimiento por apostar.
El “bet regret” es una fuerte sensación de angustia posterior a cuando haces una apuesta impulsiva. También aparece cuando has apostado estando borracho, aburrido o intentando recuperar las pérdidas. Recuerda que con las apuestas deportivas es muy fácil dejarse llevar y acabar apostando (por ejemplo) al futbol ucraniano, del que no conoces nada. Algunos de los mejores consejos para dejar las apuestas deportivas o la ruleta son los siguientes:
- No pienses en los juegos de azar como forma de ganar dinero.
- No apuestes más dinero del que puedas permitirte.
- Establece un límite de dinero por adelantado antes de empezar a apostar.
- Limita el tiempo que vas a dedicar a la sesión de juego.
- No persigas compensar las pérdidas una vez alcances los límites.
- No juegues cuando estés deprimido o enfadado.
- Combina el juego con otros entretenimientos.
- No lleves tu tarjeta de crédito encima cuando decidas apostar.
- Establece intervalos de descanso.
- No apuestes bajo los efectos del alcohol o las drogas.
Ayuda especializada como mejor consejo
Información para el familiar: si estás preocupado por el juego de algún familiar puedes sentirte enfadado, herido o traicionado. Posiblemente te resultará difícil lidiar con estas emociones, pero recuerda que es completamente normal sentirse de ese modo. Independientemente de cómo te sientas, es importante no culparte a ti mismo ni al propio jugador (el juego es un comportamiento adictivo). La ludopatía es un problema médico reconocido que puede desarrollarse por diferentes causas. Hay muchas formas de ayudar a alguien que juega, pero recuerda que no es tu responsabilidad cambiar su comportamiento.
Lo más conveniente es buscar ayuda de expertos en adicción al juego como el Centro Ludopatía Valencia. Si entiendes que necesitas dejar el juego o la ruleta, busca ayuda especializada en adicciones. Llama al teléfono 617846402 y te atenderá una de nuestras psicólogas especialistas en ludopatía en Valencia.
Realiza el test de ludopatía si necesitas conocer de forma orientativa el grado de problema que puedes estar teniendo con el juego.