Síndrome de abstinencia a la cocaína

Un hombre con síndrome de abstinencia a la cocaina.

La cocaína es una droga estimulante muy potente que suele provocar adicción. Según fuentes oficiales se estima que 20 millones de personas consumieron cocaína durante el último año. Muchas de ellas deciden abandonar el consumo, pero encuentran serias dificultades para conseguirlo debido a la fuerte dependencia psicológica que provoca. En este sentido, el síndrome de abstinencia a la cocaína (“mono”) es el conjunto de signos y síntomas que aparece al abandonar el consumo de coca. Por eso, las personas con dependencia ala coca, o las que han consumido durante mucho tiempo o en grandes cantidades, pueden presentar síndrome de abstinencia a la cocaína.

El síndrome de abstinencia a la cocaína es el conjunto de signos y síntomas que aparece al interrumpir el consumo.

Resulta fundamental conocer el síndrome de abstinencia a la cocaína porque se encuentra estrechamente relacionado con el alto índice de recaídas. Conseguir dejar la cocaína a largo plazo implica manejar adecuadamente estos síntomas ya que pueden prolongarse durante meses o incluso años.

Qué es el síndrome de abstinencia a la cocaína

El síndrome de abstinencia a la cocaína es el conjunto de síntomas que aparece al abandonar o reducir el consumo de coca. Comprende tanto la sintomatología física y psíquica, así como ciertos comportamientos. Este cuadro varía en intensidad y duración en función de diferentes factores (pureza de la cocaína, historial de consumo, adicción a otras drogas, etc.). El síndrome de abstinencia a la cocaína (“mono”) imlica un elevado desajuste anímico debido a la gran dependencia psicológica que provoca.

Las principales características del mono de cocaína son el desajuste psicológico y la fuerte apetencia por la droga.

Podríamos decir que los síntomas más frecuentes que causa la interrupción del consumo de cocaína son: ansiedad, apetencia de cocaína y un estado depresivo. A este último aspecto se le denomina ‘bajón de la cocaína’.

Síntomas del síndrome de abstinencia de la cocaína

Los síntomas del síndrome de abstinencia a la cocaína se corresponden con la dependencia física y psicológica que provoca el consumo de esta droga. El consumo de cocaína provoca, fundamentalmente, una fuerte distorsión emocional y cognitiva. Euforia, excitación y elevada autoconfianza, son algunos de sus efectos. En consecuencia, el abandono (o reducción) del consumo de cocaína implica una alteración psicológica considerable. Los principales síntomas del síndrome de abstinencia a la cocaína son:

  • Cansancio, estado de ánimo deprimido, apatía o disforia (bajón de cocaína)
  • Irritabilidad
  • Ansiedad
  • Alteración del sueño (insomnio, hipersomnia, pesadillas, etc.)
  • Alteración del apetito (hiperfagia, hipofagia y elevada apetencia de dulces)
  • Apetencia de cocaína (craving)
  • Paranoia y psicosis cocaínica

Si nos fijamos algunos de estos síntomas (ansiedad, paranoia, psicosis) se superponen con los de la propia intoxicación por cocaína. En términos generales, los principales síntomas de la abstinencia a la cocaína son opuestos a los efectos farmacológicos agudos del consumo de cocaína. Con la escala “Cocaine Selective Severity Assessment” (CSSA), podemos evaluar la severidad del síndrome de abstinencia a la cocaína (ver más abajo).

¿Cuánto dura el síndrome de abstinencia por cocaína?

La duración del cuadro sintomático que provoca la retirada del consumo de cocaína es variable. En líneas generales distinguimos 3 fases: fase inicial o de choque, fase de abstinencia, y fase de extinción. Los síntomas iniciales cursan con depresión, ansiedad, cansancio e hipersomnia y transcurren generalmente en las 24-48 horas posteriores al consumo de cocaína.

Tal vez la etapa más crítica sea la fase de abstinencia que dura aproximadamente entre 7 y 21 días. En esta fase, la apetencia de cocaína (craving) puede ser acentuada y cursa con malestar y disforia. Por último, en la fase de extinción la sintomatología disminuye su intensidad pero sigue estando presente. Esta etapa se caracteriza por el exceso de confianza ya que las personas tienden a pensar que han resuelto el problema. La duración de esta fase oscila entre 3 y 6 meses.

fases del síndrome de abstinencia a la cocaína

Un aspecto importante del mono o síndrome de abstinencia a la cocaína a largo plazo es la interacción con los estímulos o disparadores. Los adictos a la cocaína pueden experimentar durante meses síntomas similares a los de la fase inicial. Esto ocurre cuando se exponen a los disparadores. Estos estímulos pueden ser objetos relacionados con la cocaína, películas con secuencias de consumo, espacios donde se consume o se ha consumido previamente, o personas asociadas al consumo (camellos, amigos de consumo, etc.). En términos generales, la exposición a estímulos relacionados con la cocaína produce una sintomatología transitoria que puede desencadenar la recaída.

Tratamiento del síndrome de abstinencia

El tratamiento de la adicción a la cocaína es complejo, especialmente cuando aparece junto a otros trastornos psiquiátricos (patología dual). En estos casos se observa una mayor tasa de recaídas y un peor pronóstico de la adicción. En líneas generales, el abandono del consumo de cocaína implica una experiencia complicada.

Una mujer consumiendo drogas
El craving suele provocar el consumo repetido de cocaína.

Durante la abstinencia de cocaína aparecen síntomas depresivos transitorios que no cumplen con los criterios de la depresión pero que suelen desencadenar las recaídas. A su vez, los pacientes con recaídas tienen más probabilidades de padecer síntomas psiquiátricos graves de por vida. De este modo, resulta crucial manejar adecuadamente las fluctuaciones del estado de ánimo en pacientes con síndrome de abstinencia a la cocaína.

Gestionar las fluctuaciones del estado de ánimo en pacientes con síndrome de abstinencia a la cocaína resulta fundamental.

Como comentábamos, el estado pseudo depresivo por ausencia de cocaína no se corresponde con los síntomas de la depresión mayor. De hecho, suele desaparecer si se produce el consumo de cocaína. Por otro lado, los fármacos antidepresivos utilizados en el tratamiento de la dependencia a la cocaína suelen ofrecer un rendimiento inferior al del tratamiento de la depresión, aunque pueden resultar eficaces. Esto apunta a que el tratamiento psicológico resulta fundamental en personas con síndrome de abstinencia a la cocaína. De hecho, la psicoterapia puede ayudarnos a evitar las recaídas.

El tratamiento psicológico resulta fundamental en personas con síndrome de abstinencia a la cocaína.

Escala de Valoración de la Gravedad Selectiva para Cocaína

La escala “Cocaine Selective Severity Assessment” (CSSA) es una herramienta que sirve para evaluar el mono o sintomatología de la abstinencia a la cocaína. Consta de 18 preguntas relacionadas con los síntomas iniciales del síndrome de abstinencia a la coca.

Esta prueba debe ser aplicada en la fase de desintoxicación de cocaína por un facultativo previamente entrenado. Con esta escala podemos evaluar el síndrome de abstinencia a la cocaína en las últimas 24 horas. Además, los resultados sirven como predictor de la respuesta al tratamiento. Por ejemplo, en personas con adicción a la cocaína, las puntuaciones iniciales en el CSSA fueron más altas entre los que no consiguieron dejar de tomar o abandonaron el tratamiento. Si quieres realizar el test de abstinencia a la cocaína haz clic en este enlace.

Recomendaciones para conseguir dejar la cocaína

Lo primero que debemos saber es que el consumo de cocaína es altamente perjudicial; para quien la consume y también para su entorno. Si hemos consumido cocaína con regularidad lo más probable es que al intentar dejar de tomar experimentemos los síntomas citados anteriormente.

Lo más aconsejable para conseguir dejar la cocaína es pedir ayuda profesional, al igual que para dejar las drogas. Realmente es posible conseguirlo pero es imprescindible tener una firme convicción. La farmacología puede ayudarte, pero un apoyo psicológico y social apropiado resulta crucial para conseguir este objetivo. Debemos tener en cuenta que dejar la cocaína puede no resultar tan sencillo como parece a primera vista.

Para dejar de consumir fundamentalmente debes evitar personas y lugares donde se consume cocaína. Necesitarás cambiar de hábitos e incorporar rutinas saludables. Hacer deporte, comer de forma saludable y dormir bien, te ayudará a encontrarte mejor y superar el síndrome de abstinencia a la cocaína. Busca apoyo en tu familia y en personas no tóxicas (amigos, compañeros de trabajo, etc.).

En último término, si encuentras dificultades para conseguirlo pide ayuda en un centro de desintoxicación de cocaína como Ivatad Valencia Adicciones. Piensa en esto: dejar la cocaína te permitirá descubrir tu autenticidad y recuperar la libertad.