El tratamiento de la adicción a los videojuegos ha experimentado grandes cambios en los últimos años. Tradicionalmente, las personas que utilizaban los videojuegos de manera desmedida no eran considerados enfermos. De hecho, estar jugando permanentemente a la consola se entendía como un vicio, no como un problema de salud mental. Sin embargo, hoy sabemos que las personas que juegan con frecuencia a los videojuegos modifican en mayor o menor medida su conducta.
Desde que aparecieron las primeras consolas a principios de los años 70 hemos interaccionado de forma creciente con esta tecnología. Los videojuegos representan una alternativa saludable de ocio cuando se utilizan con moderación. Pero con el uso repetido o excesivo de los mismos vemos como algunas personas modifican su conducta de una forma característica. Es decir, el uso de videojuegos pasa a ser compulsivo o adictivo; de manera similar a lo que ocurre con el alcohol o las drogas. Por lo tanto, la adicción a los videojuegos necesita tratamiento psicológico para evitar una afectación progresiva del adicto y su entorno.
Definición de la adicción a los videojuegos
La adicción a los videojuegos pertenece a las denominadas adicciones comportamentales. Es decir, un trastorno en el que no intervienen drogas o sustancias. La Organización Mundial de la Salud aceptó en 2019 la inclusión de la adicción a los videojuegos como una enfermedad bajo la denominación “Gaming Disorder”. De hecho, la introdujo en un epígrafe específico junto a la ludopatía (“Gambling Disorder”). La adicción a los videojuegos y su tratamiento aparecen reflejados en el ICD-11 en el apartado “Trastornos por Conductas Adictivas”, junto a otras adicciones más conocidas.
La adicción a los videojuegos consiste en el uso problemático y compulsivo de los juegos electrónicos.
Cabe destacar que los videojuegos pueden ser con conexión a internet (online) o sin ella, pero ambos pueden provocar adicción. Sin embargo, la adicción a los videojuegos aparece fundamentalmente con la modalidad de videojuegos a través de internet (“Internet Gaming Disorder”).
Causas de la adicción a los juegos digitales
La integración de internet en nuestra vida diaria implica cambios constantes en nuestro comportamiento. Los videojuegos se han implementado en los últimos 50 años como parte natural de nuestro hábitat doméstico. Resulta complicado encontrar un hogar donde no exista una consola de videojuegos o un ordenador con acceso a internet. Además, los teléfonos móviles, los televisores y otros dispositivos tienen juegos preinstalados cuando los adquirimos. Por todos estos motivos, el primer y principal factor que predispone a sufrir adicción a los videojuegos reside en el uso inadecuado de internet.
Por otro lado, los trastornos psiquiátricos subyacentes pueden facilitar la adicción a los videojuegos. Existe una gran asociación entre la adicción a los videojuegos y la ansiedad, la depresión, el TDAH, la fobia social o un escaso apoyo psicosocial. Todos estos factores pueden actuar como catalizadores de la adicción a los videojuegos.
Por último, sabemos que es más prevalente la adicción a los videojuegos en hombres que en mujeres. Del mismo modo, son más susceptibles al efecto de los videojuegos los niños y adolescentes que los adultos. Sin embargo, no es posible asegurar que exista una causa genética o predisposición como consecuencia de antecedentes familiares.
Síntomas de un adicto a los videojuegos
En primer lugar, establecer un valor de lo que podemos considerar “uso excesivo de videojuegos” resulta fundamental para identificar los síntomas de la adicción a los videojuegos y su tratamiento. Podríamos decir que jugar más de dos horas al día es el principal síntoma de la adicción a los videojuegos. Además, otros síntomas del Gaming Disorder son:
- Preocupación sobre aspectos del juego (mayor que sobre otros aspectos fundamentales: estudios, trabajo, vida social).
- Dificultad para dejar de jugar.
- Cambios del estado de ánimo (euforia cuando juega o enfado cuando no puede jugar el tiempo que desea).
- Aumento progresivo del tiempo y frecuencia de juego.
- Reducción de actividades sociales y familiares.
- Ciclo del sueño alterado (sacrifica las horas de descanso para jugar).
- Miente con frecuencia y oculta la relación que mantiene con los videojuegos.
Aunque hemos definido la adicción a los videojuegos como un uso problemático y compulsivo, lo cierto es que el trastorno de los juegos de Internet se caracteriza más por la impulsividad que por la compulsividad. Por ejemplo, la adicción al Fortnite.
Test de la adicción a los videojuegos
Existen dos test aprobados por la comunidad científica para identificar y evaluar la adicción a los videojuegos: “Internet Gaming Disorder” (IGD) e “Internet Gaming Disorder Scale Short Form” (IGDS9-SF). Este último ofrece resultados avalados para establecer un diagnóstico de la adicción a los videojuegos. Para realizar el test de adicción a los videojuegos haz clic aquí.
Tratamiento de la adicción a los videojuegos
No existe un tratamiento farmacológico específico destinado a curar la adicción a los videojuegos. Probablemente, un enfoque reeducativo respecto del uso apropiado y saludable de los videojuegos sea la mejor estrategia. No hay que descartar la abstinencia total como punto de partida del tratamiento de la adicción a los videojuegos. Es decir, restringir temporal y totalmente su uso. De hecho, existen programas y centros de desintoxicación específicos para videojuegos donde queda restringido el acceso a internet durante un tiempo.
No obstante, el manejo de la adicción a los videojuegos, al igual que el de otros trastornos del juego como la ludopatía, requiere una intervención psicoterapéutica apropiada. El uso de la farmacología no debe ser descartado, pero podríamos decir que no va a representar un factor vinculante en la mayoría de casos. La psicoterapia de corte cognitivo conductual es la estrategia más eficaz para abordar la adicción a los videojuegos.
Como en otras adicciones comportamentales la atención simultánea del entorno familiar puede resultar imprescindible. Es decir, la familia del adicto a los videojuegos necesita apoyo específico por parte de los psicólogos especialistas en adicciones. Establecer una estrategia terapéutica conjunta en el seno familiar (horarios en el uso de internet, pautas de utilización de los dispositivos, etc.), suele mejorar los resultados del tratamiento. Para más información contacta con Ivatad.